Texto: Redacción Cuba Noticias 360
Foto: RL Hevia
Sin grandes bombos ni platillos, la mediofondista Rose Mary Almanza ha sabido labrarse un nombre propio en el atletismo cubano durante los últimos tres lustros. A diferencia de muchas otras tantas figuras que han logrado poner a la isla caribeña en el medallero de Juegos Olímpicos y Campeonatos Mundiales, el premio de la camagüeyana ha sido el de la constancia.
Por supuesto que cualquier atleta tiene como principal aspiración subir al podio y no es que ella no lo haya logrado jamás. Su medalla de plata, por ejemplo, en los 800 metros de los Juegos Panamericanos de Lima 2019 da fe de ello. Pero en el deporte, y mucho más en uno como el atletismo, colgarse una presea no es el único sinónimo de éxito.
Hay quien logra tocar la gloria bajo los cinco aros, escuchar el himno nacional de su país resonar por todo el estadio, pero no logra experimentar algo parecido nunca más. Y ahí es cuando la ya veterana corredora, próxima a cumplir los 32 años de edad, puede decir con orgullo que está a punto de vivir por cuarta ocasión en su carrera una experiencia así, luego de obtener recientemente su clasificación a París 2024.
Almanza certificó su pasaporte a la capital francesa este domingo en el Mitin Atlético de Forbach, en Francia al ganar la doble vuelta al óvalo con un crono de 1:58.89 minutos, su mejor registro de la temporada. De esa forma, rebajó la marca exigida por World Athletics de 1:59.92 y se convirtió en la séptima representante del atletismo insular en asegurar su presencia en París, así como la número 37 en engrosar la delegación cubana a la magna cita.
A solo una centésima de la cota mínima se quedó la también agramontina Daily Cooper, quien entró tercera en la misma prueba de Almanza con tiempo de 1:59.92. Esta es otra corredora que en el futuro próximo pudiera lograr su boleto, al igual que la matancera Sahily Diago, monarca de la distancia en los últimos Juegos Panamericanos de Santiago de Chile 2023.
Entre los otros aspirantes de la isla caribeña que buscan su clasificación a la “Ciudad de la Luz” en el llamado “deporte rey”, se encuentra el saltador de longitud Juan Miguel Echevarría. Después de meses alejado de los focos mediáticos, el subtitular de los Juegos de Tokio 2021 comenzó hace poco a entrenar bajo las órdenes del también cubano Iván Pedroso y anunció que irá por el boleto olímpico en representación de Cuba.
Antes de la plaza de Rose Mary Almanza, el atletismo antillano contaba con solo seis exponentes asegurados a París, cuatro de ellos representantes del triple salto: Leyanis Martínez y Liadagmis Povea en el caso de las mujeres y Lázaro Martínez y Christián Nápoles en el de los hombres. A ese cuarteto lo acompañaba Roxana Martínez (400 metros planos) y el saltador de altura Luis Enrique Zayas.
