Foto: RL Hevia
Texto: Fede Gayardo
Como parte de las nuevas regulaciones emitidas por el Estado cubano para la importación de carros a la isla, se conoció que los colaboradores en el exterior deberán cumplir con algunas condiciones para importar los vehículos.
Según indicó esta semana en Facebook, el ministro de Transporte Eduardo Rodríguez Dávila, la autorización de importación para personas naturales y jurídicas debe publicarse y entrar en vigor antes de que termine el mes de octubre.
En la red social, el dirigente publicó un extenso texto donde aclaraba algunas de las cuestiones referentes a esta nueva normativa.
Respecto a los colaboradores cubanos insistió que podrán importar directamente y por una sola vez por núcleo familiar, un auto nuevo o de segunda mano (con hasta un máximo de 10 años desde la fecha de su fabricación), eléctrico, de combustión o híbrido, de tipo económico o medio.
Luego, Rodríguez añadió que entre los requisitos que deberán cumplir los beneficiarios de esta medida se encuentran: “desempeñarse en el exterior de manera continua como mínimo por tres años, contar con una evaluación favorable de su desempeño, así como deberán correr con todos los gastos a partir de sus ingresos, según se disponga”.
Una vez llegado el vehículo a Cuba, deberán pagar los aranceles de importación, que serían 100 USD para los autos eléctricos, 200 USD para los híbridos y 300 USD para los de motores de combustión. También deberán abonar el “correspondiente servicio de aduana en divisas convertibles, que tendrá un valor de 8 USD”.
Los colaboradores cubano podrán además cambiar este derecho de importación por la compra de un carro en Cuba en alguna de las comercializadoras autorizadas: Si así lo hacen contarán con beneficios del 50% en el pago de los impuestos en divisas convertibles.
Por último, Rodríguez Dávila aseguró que “el Ministerio del Transporte emitirá y actualizará recomendaciones técnicas sobre las marcas y modelos que mejor desempeño y respaldo de servicios tienen en Cuba, así como evaluará las alternativas para aquellos colaboradores que se desempeñan en países en que la conducción es con el timón a la derecha, teniendo en cuenta que en Cuba no podrán circular, por lo que habría que adquirir el vehículo en un tercer país”.
En julio pasado, el gobierno de la isla anunció los requisitos para la importación de vehículos y entre las novedades estuvo la posibilidad de importación de autos para el personal diplomático, representantes de empresas en el extranjero y profesionales que participan en las misiones de colaboración en el exterior, entre ellos los médicos.
Entre el resto de medidas anunciadas por el primer ministro, Manuel Marrero, está la aprobación de una nueva política para la transmisión de la propiedad de vehículos de motor, remolques y semirremolques, su comercialización e importación.
Este traspaso de propiedad se permitirá entre las personas naturales y jurídicas, excepto diplomáticos extranjeros, cumpliendo con las normas tributarias.
Asimismo se autoriza a la empresa de Servicios Automotores S.A. (SASA) a importar y comercializar carrocerías de vehículos de motor y cuadros de motocicletas en divisas convertibles, exclusivamente como reposición. No obstante, se limitará la cantidad y los tipos de vehículos que podrán importar las formas de gestión no estatal.
