Foto: RRSS
Texto: Fede Gayardo
Autoridades del Ministerio de Salud Pública de Cuba (MINSAP) expusieron durante una intervención en la televisión estatal detalles sobre la atención médica brindada al niño Damir Ortiz en el Hospital Pediátrico Juan Manuel Márquez, de La Habana.
Según afirmaron, en el caso del menor, quien fue trasladado a un hospital de Miami en estado crítico tras una intensa campaña en redes sociales, todas las decisiones médicas “fueron tomadas por consenso” porque la “prioridad siempre fue el bienestar del niño”.
Respecto a la decisión de no proceder a una biopsia, indicaron que la misma fue tomada por la familia, y no por el equipo médico. Asimismo, un portavoz del hospital resaltó que “no es un milagro que el niño esté mejor actualmente; es la consecuencia esperada de aplicar correctamente el tratamiento oncológico específico y de contar con el apoyo adecuado en cuidados de sostén en Cuba”.
Igualmente se hizo mención a las críticas sobre la falta de tratamiento, asegurando que se enfrentó una situación complicada en la que “se perdieron oportunidades” por la negativa de la madre del niño a autorizar ciertos procedimientos médicos.
Por su parte, la propia madre de Damir, Eliannis Ramírez, continúa insistiendo en que su hijo fue sometido a un tratamiento deficiente en Cuba y recibió un diagnóstico inexacto, lo que puso en riesgo su vida.
Tanto ella como otros activistas han denunciado la carencia de servicios médicos adecuados en la isla para atender enfermedades graves, especialmente en casos de niños que sufren largos períodos sin la atención necesaria.
Tal es el caso de la activista Diasniurka Salcedo, quien colaboró para enviar al menor fuera del país y refirió que la salud de Damir se había deteriorado tras años de enfermedad agravada por la falta de atención oportuna.
Luego de la intervención televisiva del MINSAP, Ramírez anunció una conferencia de prensa para este lunes y decidió mantener en reserva el diagnóstico obtenido en Miami, aunque no descartó la posibilidad de emprender acciones legales contra las autoridades cubanas.
El caso de Damir Ortiz ha tenido una gran visibilidad en medios de prensa y redes sociales, principalmente al conocerse la demora en la entrega por parte de los médicos que atendían al menor de una carta y expedientes necesarios a la Embajada de EE.UU. en La Habana para que se otorgara a la familia una visa humanitaria.
El pasado 12 de marzo, Damir fue trasladado a un centro hospitalario en Florida, donde se identificó una patología distinta a la que se había comunicado en Cuba. Según la madre del niño, su arribo sucedió en estado séptico a causa de una bacteria pulmonar no detectada en la isla, y el diagnóstico inicial de leucemia resultó ser erróneo.