Foto: Woward Weiss | Shutterstock
Texto: Hugo León
La pelea más promocionada y esperada del año, la del ex boxeador peso pesado Mike Tyson contra el joven youtuber Jake Paul, llegó finalmente la noche del sábado y, para sorpresa de muchos y desilusión de otros, fue el jovencito quien se hizo con la victoria.
Un show enorme para poco espectáculo en el ring, coinciden muchos comentaristas deportivos al describir lo ocurrido anoche en el cuadrilátero. La pelea tuvo tanto marketing y era tan esperada que se estiman en decenas de millones las ganancias para ambos contendientes.
Pero más allá de las ganancias, el espectáculo tuvo poco nivel si de boxeo se trata. Mike Tyson volvió al ring a los 58 años para una pelea “profesional”, pero pese a las esperanzas de muchos de volver a ver a la bestia de acero que una vez fue, en esta ocasión quien subió al ring no fue más que la sombra de la superestrella de los 80 y 90.
A nadie le queda dudas de que Jake Paul no hubiera tenido ni la más mínima oportunidad contra el Mike Tyson de hace 35 años, pero el tiempo no perdona y en esta ocasión fueron la edad y la resistencia del youtuber las que se impusieron.
En los primeros dos rounds sí pudo Tyson intentar conectar y se le vio con posibilidades, pero ya después de eso, a partir del tercero, se convirtió en un blanco lento y completamente fatigado, fácil de alcanzar para Jake Paul. Este último, sin embargo, parecía por momentos que no quería conectar demasiados golpes en la ex superestrella, tal vez por respeto a su salud y a la leyenda.
Después del tercer asalto, los golpes de Tyson prácticamente no existían y tampoco podía seguir el ritmo de la movilidad de su oponente, pero no se pronosticaba ningún nocaut ni tampoco golpes que dañaran demasiado a ninguno de los contrincantes.
El combate fue pactado a ocho rings, de dos minutos cada uno, y Mike se sostuvo en los ocho. Ambos ganaron millones de dólares, de acuerdo con fuentes dedicadas a temas deportivos, Tyson no salió lastimado y Paul dio más tamaño a su fama: un “win-win” como dirían los organizadores.
Al llegar el final de la pelea, el resultado fue una victoria de Paul por decisión unánime: tarjetas de 80-72, 79-73 y 79-73 para Paul.
Las estadísticas mencionan también que Paul conectó 59 de los 200 golpes que lanzó contra Mike Tyson, mientras que este último acertó 16 de 87 intentos, la mayoría en los dos primeros rounds del combate.
Cierra así este capítulo en la vida de Mike Tyson, uno de los mejores boxeadores de la historia, y Jake Paul, el youtuber que se ha adentrado en el boxeo profesional. Para muchos, una noche algo bizarra que nunca debió llegar, y para otros un negocio jugoso simplemente imposible de dejar pasar.
Eso sí, al final del encuentro, una reverencia de Jake Paul hacia su oponente dejaron claro que más allá del resultado de la pelea y del show que promocionó una «rivalidad», la realidad es que el respeto es mayor.
