Foto: Shutterstock (Imagen referencial)
Texto: Fede Gayardo
La provincia de Las Tunas presenta una situación particular respecto al resto de los territorios cubanos al reportarse casos activos de lepra. Según las autoridades sanitarias locales durante el año pasado se identificaron seis casos nuevos, mientras que en algunos municipios del sur aún persisten activos.
El medio estatal Periódico 26 informó que la transmisión se ha mantenido debido a la predominancia de la forma multibacilar en la población infantil. En declaraciones a la citada fuente, Martha Odalis Cabrales León, coordinadora del Programa de Lucha contra la Lepra en la provincia, señaló que durante este año se evidencia una mayor incidencia de la enfermedad en la zona sur de Las Tunas aunque no precisó cuáles son las áreas con mayor contagio.
A pesar de este escenario, la especialista aclaró que la lepra no constituye un “problema de salud”, ya que “los pacientes notificados están en la comunidad, trabajan, cuentan con la debida supervisión y tienen el tratamiento gratuito de antibióticos. Los equipos básicos de Salud son los mayores responsables de su bienestar”.
Cabrales agregó que la lepra afecta a ambos sexos y que, en los últimos cinco años, se han detectado casos en niños en la provincia, los que han presentado síntomas tales como manchas oscuras y nódulos cutáneos.
Luego, amplió que “el período de incubación es de unos cinco años como promedio, aunque estudios demuestran a nivel global que puede extenderse hasta 20, y cuando no se diagnostica ni se trata tempranamente puede causar lesiones progresivas y permanentes en la piel, los nervios de las extremidades y los ojos”.
Aunque la coordinadora del programa afirmó que, una vez tratado, el contagio cesa, algunos cubanos muestran preocupación ante la actual crisis sanitaria y la escasez de medicamentos e insumos, lo que podría dificultar el control de la enfermedad y permitir su expansión a niveles más preocupantes.
En un contexto más amplio, hasta hace seis años se diagnosticaban anualmente más de 100 casos nuevos de lepra en Cuba, alcanzando 186 casos en 2016. En 1993, la lepra dejó de considerarse un “problema de salud” en el país, al cumplir con el indicador de la Organización Mundial de la Salud (OMS) de menos de un caso por cada 10 mil habitantes.
Sin embargo, tanto la Organización Panamericana de la Salud como la OMS en Cuba han informado que cada año se descubren en promedio cerca de 200 nuevos casos en todos los grupos etarios, incluidos los niños.
La investigación titulada “Lepra en niños en Cuba: descripción epidemiológica y clínica de 50 casos entre 2012 y 2019”, citada por el medio Martí Noticias, reveló que la provincia de Granma concentró el mayor número de casos (346), seguida por Guantánamo (189), La Habana (146) y Ciego de Ávila (144), aunque la enfermedad se ha presentado en todas las regiones. En 2023, la Organización Panamericana de la Salud reportó 142 diagnósticos en la isla.
