Foto: RRSS
Texto: Redacción Cuba Noticias 360
La Asamblea Municipal del Poder Popular del municipio Centro Habana informó que fue hallado sin vida el cuerpo del menor que fue arrastrado por las olas del mar el pasado jueves en las cercanías de la Punta, en el malecón habanero.
El nombre de la víctima es Carlos Javier Sánchez, de 16 años, y aunque la versión oficial señala que se estaba bañando en una zona prohibida, un internauta destacó que el joven estaba sentado en el muro y, al intentar recuperar una chancleta que se le cayó hacia el arrecife, fue arrastrado por el fuerte oleaje.
La búsqueda comenzó en la misma tarde del jueves y desde el momento del aviso entraron al agua los técnicos de salvamento y rescate, apuntó el órgano de gobierno en su cuenta de Facebook.
La entidad añadió que las operaciones se suspendieron en la noche pero fueron reanudadas en la mañana del viernes con la colaboración de fuerzas del Ministerio del Interior, las tropas Guardafronteras, equipos especializados y el Sistema Integrado de Urgencias Médicas.
El operativo finalmente culminó con el hallazgo del cadáver en la tarde del viernes. Las autoridades capitalinas recordaron que la zona donde ocurrió el incidente tiene restricciones para el baño, especialmente cuando el oleaje alcanza el muro del malecón.
Este es la segunda vida de un menor que se pierde en La Habana en las últimas semanas debido a accidentes vinculados con fenómenos meteorológicos. El pasado 24 de febrero un joven cayó en un tragante sin tapa en la barriada de Luyanó y su cuerpo fue arrastrado por las aguas que provocaron las fuertes lluvias que ese día azotaron la capital cubana.
Un video que capturó el suceso se hizo viral en las redes sociales y sensibilizó a todo el país. Lamentablemente, las autoridades confirmaron la muerte de Jonathan Oliva, de 13 años, luego de que fuera encontrado sin vida dos días después en la Bahía de La Habana.
Según reflejaron varios reportes en redes sociales, el niño regresaba de su escuela cuando la lluvia lo atrapó en una zona que se inunda históricamente, como son las inmediaciones de Concha, Vía Blanca y la calle Villanueva, muy cerca del Hospital Miguel Enríquez, conocido como La Benéfica.
