Texto: Redacción Cuba Noticias 360
Foto: Cuba Noticias 360
La Empresa de Telecomunicaciones de Cuba (Etecsa) atraviesa un momento complejo tras registrar una drástica reducción de sus ingresos exportables en más del 50 %, aunque sostiene que en 2024 logró aumentar la cantidad de líneas móviles y fijas activas en el país.
Según datos ofrecidos por su presidenta ejecutiva, Tania Velázquez Rodríguez, estos ingresos provenientes en su mayoría de recargas internacionales, representaban el 63% de los ingresos totales en 2020. En 2024, esa cifra cayó al 10%, afectando de forma directa la capacidad de inversión en tecnología e infraestructura.
A pesar del retroceso económico, Etecsa activó más de 259 000 nuevas líneas móviles este año, lo que eleva a 1.9 millones el número de habaneros con servicio de telefonía celular. De ellos, el 73% cuenta con acceso a Internet en sus dispositivos, según reportan medios oficiales.
Se dejó claro que este crecimiento se produjo sin la instalación de nuevas radiobases, infraestructura esencial para mejorar la conectividad. Directivos de Etecsa reconocieron que el costo de una radiobase en el mercado internacional ronda los 100 000 dólares, cifra que hoy no puede pagar el monopolio comunicacional.
Con el objetivo de mejorar la calidad del servicio, Etecsa instaló 41 Gabinetes Integrales Exteriores (GIE), de los cuales 29 ya se encuentran en funcionamiento. Las acciones se concentraron en municipios habaneros con alta demanda y problemas de infraestructura como Diez de Octubre, Cerro y Arroyo Naranjo.
En cuanto a la telefonía fija, se sumaron más de 3 000 nuevas líneas en lo que va de año, alcanzando un total de 473 000 abonados. El 80% de estos pertenece al sector residencial. Además, la Telefonía Fija Alternativa (TFA) benefició a 9 800 usuarios con opciones de pago más flexibles y servicios como recargas y llamadas internacionales.
Aunque la empresa muestra señales de crecimiento en la base de usuarios, los problemas financieros siguen siendo un obstáculo para avanzar en la modernización de sus redes. La caída en los ingresos por recargas internacionales marca un punto crítico para Etecsa, que busca sostener su funcionamiento en medio de serias limitaciones.