Texto: Redacción Cuba Noticias 360
Foto: Cuba Noticias 360
En la provincia de Villa Clara, el gobierno local aplica desde el 20 de diciembre un sistema de precios topados para productos agropecuarios, para controlar la inflación y el mercado, sobre todo en estos días festivos.
En productos como viandas, granos y hortalizas, la medida impacta directamente, aunque, en la práctica, no se cumpla al pie de la letra, con recurrentes incumplimientos de las regulaciones.
Algunas frutas como la piña (60 CUP), la guayaba (45 CUP) y la fruta bomba (35 CUP), así como granos como el frijol negro y colorado (270 CUP), el arroz de consumo (150 CUP) y la harina de maíz (80 CUP) y viandas como la malanga colocasia (35 CUP), el plátano vianda (25 CUP) y la yuca (20 CUP), unido a hortalizas como el tomate (140 CUP), el pepino y la lechuga (60 CUP cada uno), aparecen en este listados de precios topados.
Si recurrimos a las denuncias de los cubanos en redes sociales, encontramos que existen valores mucho más altos en mercados informales, provocando una desigualdad en el acceso a los alimentos.
Tanto economistas como productores sostienen el criterio que los precios topados no suelen ser efectivos, pues estos no tienen en cuenta los costos reales de producción, provocando una desmotivación en los agricultores, quienes, claramente, buscan más el mercado negro o almacenan sus cosechas, previendo pérdidas.
De cualquier manera, la política de precios topados continúa siendo un tema de debate en el contexto nacional, y aunque solo han trascendido la medida en ferias de Santa Clara, no es de extrañar que se aplique en todo el país, aprovechando el fin de año, cuando suele encarecerse gran parte de los productos.
Aunque el gobierno lo ve como un intento para controlar la inflación, por otro lado, se consideran mecanismos de supervisión para los productores, que da al traste al desabastecimiento y la especulación en el mercado.
