Foto: Cubadebate
Texto: Fede Gayardo
Después de una prolongada ausencia en farmacias y centros médicos de Cuba, reaparece el test de embarazo HeberFast Line MaterniTest II, aunque esta vez con su valor anterior duplicado: 120 pesos cubanos (CUP) por unidad.
El producto, de fabricación nacional, vuelve a estar al alcance de la población tras meses de escasez motivados por contratiempos en su proceso de elaboración y distribución. Según datos oficiales, esta prueba rápida se expende nuevamente a través del sistema de salud pública y en la red de farmacias del país.
El único sitio donde se produce este test es el Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología (CIGB), ubicado en Sancti Spíritus. Desde allí, el máster en ciencias Rafael Ibargollín Ulloa, experto en Genética Clínica y jefe del área productiva, ofreció declaraciones a la estatal Agencia Cubana de Noticias (ACN) sobre el actual panorama de distribución del dispositivo.
Justificó el alza en el precio señalando que “su costo sigue siendo inferior al de pruebas importadas que, según él, carecen de registros sanitarios o presentan una calidad inferior a la versión nacional”.
Asimismo, recalcó que el ajuste económico responde a la necesidad de “respaldar los volúmenes necesarios para el sistema de salud”, con el propósito de garantizar una oferta estable en todo el país y evitar interrupciones en el suministro.
El test posee una precisión que supera el 99 % y permite identificar un embarazo en apenas 10 minutos, utilizando una muestra de orina. Esto es posible gracias a la detección de la hormona gonadotropina coriónica humana (hCG), presente en el cuerpo desde las primeras semanas de gestación.
Ibargollín también hizo énfasis en otro aporte del HeberFast Line: su utilidad en la detección temprana de embarazos ectópicos. Al respecto, señaló que “además de confirmar el embarazo, esta herramienta médica facilita la detección precoz de embarazos ectópicos, lo que permite actuar a tiempo y evitar complicaciones graves, incluida la muerte materna”.
El especialista ponderó el valor científico del test y recomendó su uso ante cualquier duda o sospecha de embarazo para favorecer una atención médica adecuada desde las etapas iniciales.
Su ausencia en el sistema de salud cubano fue altamente comentado y debatido, teniendo en cuenta la gran demanda que tenía el mismo en la isla. En 2022, por ejemplo, diversos medios recogieron testimonios sobre el crecimiento del interés por adquirir estas pruebas de embarazo a través de plataformas de compraventa digitales.
Antes de esto, en 2016, la ACN informó que se registraron más de 120 mil ventas del MaterniTest II y destacó que las “autoridades encargadas aseguran que se trabaja para disminuir el precio de este producto en aras de potenciar el fácil acceso a la población al mismo, considerando que la utilidad del test en el control natal y planificación familiar”.
Queda por ver si esta nueva etapa del test cubano logrará conciliar eficacia, disponibilidad y un precio justo para todas las mujeres que dependen de él como herramienta esencial para su salud reproductiva. Por el momento, solo está claro que su valor se ha duplicado.
