Fotos: Jorge Luis Borges | CN360
Texto: Fede Gayardo
Este domingo Madrid vivió una noche única gracias a Daymé Arocena. Como arma la cubana trajo su voz y esos nuevos ritmos resultados de su ‘Almeki’. Las víctimas, quienes allí estuvieron, fueron arrasadas por el sabor de su fusión y por esa nostalgia de una Cuba que, gracias a ella, se sintió más cerca de la capital española.
Desde febrero pasado, Daymé está girando el mundo con su nuevo álbum, el quinto de estudio que apareció bajo la producción de Eduardo Cabra y en el que la cantante pone una vez más su sello personal a través de una mezcla de canto neo-soul, ritmos afrocaribeños y pop moderno.
En la escena de la Sala Villanos, Daymé estuvo acompañada, entre otros, por Yoyi Lagarza, Ayme Canto, y Magela Herrera, a quienes se le sumaron varios invitados de lujo. Primero, el cantante canario St Pedro con quien la cubana unió su voz para regalar un momento mágico.
Luego, se unió el compositor, productor y guitarrista español Javier Limón. Un lujazo sin dudas. Y por si fuera poco, su coterráneo Joao del Monte, a ritmo de “Suave y Pegao”.
Sus fans pudieron disfrutar no solo de las nuevas canciones que trae este fonograma porque Arocena fue más atrás, justo a esos hits de su ‘Cubafonía’ y su ‘Sonocardiograma’ que despertaron la nostalgia y pusieron a rumbear a más de uno de los presentes.
Sobre la escena ella es un huracán, una monstrua, una diosa, pero sobre todo, una artista de las de verdad, de las que entrega todo a todos. Ahora continúa recorrido por EE.UU., así que atentos los que quieran disfrutar de este espectáculo irrepetible y auténtico que se llama Daymé Arocena.
