Texto: Redacción Cuba Noticias 360
Foto: Shuterstock
Luego de varios años sin recibir mantenimiento, el popular Mural de la Prehistoria de Viñales, inició un proceso de restauración y varios medios estatales dieron detalles de esta necesaria intervención.
Por ejemplo, Yecenia García, especialista principal de Comercialización de la Sucursal Extrahotelera Palmares en Pinar del Río, comentó: “Para nosotros constituía una preocupación muy grande, porque veíamos que se estaba deteriorando. Solo se le realizaban acciones de limpieza, de forma parcial”.
La proyección de los trabajos en el mural con superficie de 160 metros de ancho por 120 se extenderá hasta el mes de marzo, en una restauración supervisada por campesinos locales.
Algunas causas que llevaron a la demora de esta restauración planteadas por los encargados de este sitio fue la falta de recursos y la complejidad del trabajo.
Dicha obra fue idea de Leovigildo González, discípulo del muralista mexicano Diego Rivera, a principios de la década de 1960, pero ejecutada por 21 campesinos de la zona que pintaron colgados en arneses de paracaidistas.
Se dice que fueron los propios pintores iniciales y sus descendientes quienes asumieron el mantenimiento del mural, en los primeros años, pero naturalmente debido a su longevidad fue necesario contratar una brigada especializada en la conservación de obras paisajísticas, con experiencia, sobre todo, en el alpinismo.
Como conocen todo el que lo ha visitado, en la obra sobresale la imagen de los primeros hombres que habitaron en esta parte del territorio nacional, conocidos como guanahatabeyes, los cuales vivían de los frutos proporcionados por su caza, pesca y recolección.
El Mural de la Prehistoria es uno de sitios más visitados por turistas de todo el mundo. Dentro del Valle de Viñales, el lugar sobresale por su contacto directo con la naturaleza y sus hermosos paisajes.